MIÉRCOLES
Jordi Cebrián
Es el día más inexistente, demasiado lejos del domingo como para propiciar melancolías, y demasiado lejos del sábado para acarrear esperanzas. Por eso muchas veces los miércoles desaparecen, dejan de existir, y la gente sin saberlo se ha comido un día, y tienen la sensación de que la semana ha sido corta. Los jefes de estado procuran no llamarse, pues saben que en otro país podría ser ya jueves, y se podría liar. Hay pueblos remotos a los que no puede llegarse en miércoles, pues no están, desaparecen ese día, y hasta las carreteras que llevan hasta ellos resultan inútiles.